8 DE SEPTIEMBRE, DÍA DE LA ALFABETIZACIÓN
Sergipe, nordeste del Brasil: Paulo Freire inicia una nueva jornada de trabajo con un grupo de campesinos muy pobres, qué se están alfabetizando.
-¿Cómo estás, Joao?
Joao calla. Estruja su sombrero. Largo silencio, y por fin dice:
-No pude dormir. Toda la noche sin pegar los ojos.
Más palabras no le salen de la boca, hasta que murmura:
-Ayer yo escribí mi nombre por primera vez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario